Un padre de familia

Vivimos unos dias muy especiales. Nuestras calles se llenan de alegria y juventud, vienen del mundo entero, de todos los paises, con un solo fin, estar cerca del Vicario de Cristo en la tierra. Es una gran gozada ver esos rostros jovenes y alegres, que reflejan nobleza y que quieren ser mejores, luchar por en contrar su camino en la vida. Han elegido bien, si todavia no están seguros los vemos acercarse al Sacramento de la Confesión, sin ningún pudor, con toda naturalidad, para ver con claridad que quiere El Señor de cada uno de ellos. !!!Cuanto tenemos que aprender de esta juventud, que hoy llena Madrid!!!

Paso este mes de Agosto, en una pequeña casita situada cerca del Santuario de Torreciudad, cerca de Barbastro. El ambiente es muy familiar, todos nos conocemos y convivimos de una manera muy pacifica que ayuda al descanso, y a la ayuda mutua. Disponemos de una zona deportiva muy completa, con un entorno muy adecuado para hacer excursiones, y hacer algún deporte que ayude a mantener la  forma fisica. Tambien nos ocupamos de mantener la forma en el terreno espiritual, para ello todos los dias subimos al Santuario, distante unos cuatro kilometros, donde se asiste a la Santa Misa, a la vez que se pueden poner en practica diversas devociones, que ayuden a estar más cerca de la Virgen, a la que se tiene gran devoción en esta Región. Es una ocasión única para llevar a hijos y nietos e ir formandolos, para que aumenten su amor a Maria. Es una gozada ver la explanada del Santuario muy concurrida, de familias que se ponen como objetivo, aumentar cada dia un poco más su amor a Dios y a