Ayudar a los demás.
Vivimos unos momentos en los que pienso que se debe decir así no puedo seguir, tengo que ayudar a los demás.
Lo primero es no cruzarse de brazos ante esta obligación, viviendo exclusivamente atento a los propios intereses personales, dejando pasar los días, matando el tiempo, o en ese ir tirando, como ordinariamente se dice, es creer que esto es posible.
Si no creemos que podemos salvar a nuestros contemporáneos de la ignorancia, del error, del sectarismo beligerante del ateismo reinante, ni siquiera lo intentaremos. Creen en la verdad y creer en su fuerza de convicción, en su capacidad de abrirse paso, como un río impetuoso que atraviesa los montes. Esto es lo primero: creer en la verdad.
Creer en la verdad, vivirla, enseñarla. Este deber de difundir la verdad es particularmente urgente en un tiempo, como el nuestro, en que el materialismo agresivo no descansa ni regatea sus recursos para convencer al hombre que él es la verdad, él quien la crea.
Comentarios
La acción es la vida "la verdad y el amor se hacen"
Hermosa y cierta tu entrada.¿Maestro
Para ganar la vida eterna?
Maestro-"HACED" lo que yo hago! los paralíticos andan ,los ciegos ven...
Dar mejor vida en esta vida, hoy, aquí y ahora,
¡Gracias por existir!
Besos.
Un abrazo y gracias por tu jugoso comentario
Con todo cariño y afecto
Gracias por tu comentario un saludo afectuoso.
a veces nos dejamos llevar por el respeto humano. Ayudar con el jemplo es la mejor manera para dar la mano a quien lo necesita.
Saludos
Un abrazo
Un abrazo
Con gran afecto