Agarrado a la cuerda.

 

Cuentan de un alpinista, desesperado por conquistar el Acocagua, que inició su travesia después de años de preparación, pero se decidió a subir sin compañeros.
Empezó a subir, se fué haciendo tarde, no se preparó para acampar, decidió seguir subiendo y le oscureció. La noche cayó con gran pesadez, no se veia nada, no habia luna, las estrellas las cubrian la nubes.
Al seguir subiendo en estas condiciones, resbaló y se desplomó por los aires, seguia cayendo, en esos momentos pasó por su mente toda su vida, pensaba que iba a morir, pero de repente sintió una gran sacudida y un tirón muy fuerte. Como todo alpinista experimentado, habia clavado estacas de seguridad con candados a una larga soga atada a su cintura.
En esos momentos, suspendido en el aire sin ver nada,gritÓ:
"DIOS MIO AYÚDAME", una voz le respondió:"¿QUE QUIERES QUE HAGA?"... "SALVAME DIOS MIO.."
"REALMENTE CREES QUE PUEDO SALVARTE?"...."POR SUPUESTO SEÑOR"..."ENTONCES CORTA LA CUERDA QUE TE SOSTIENE.."
Hubo un momento de silencio y quietud...

Cuenta el equipo de rescate, que al dia siguiente, encontraron colgado a un alpinista congelado, muerto, agarrado con fuerza a una cuerda...A DOS METROS DEL SUELO...

Y nosotros que tan agarrados estamos a nuestra cuerda....por que no la soltamos?...
Posted by Picasa

Comentarios

Ludmila Hribar ha dicho que…
Tu la soltarías?
Yo? Pues no lo sé!

"Hombres de poca fé porque dudais" !!!!
icue ha dicho que…
Iludmila.
Como tu dices, es un problema de fe, y eso no se compra, la fe la da Dios, y tenemos que decirle con frecuencia "aumentame la fe" y entonces no dudamos en soltar la cuerda.

Entradas populares de este blog

Nos nace Jesús.

La familia es una escuela.

Dejar volar alto